Black Mesa

Black Mesa es una modificación de Half-Life, el juego que hizo que Valve saltase a la fama y comenzase a ser el gigante que actualmente es, que básicamente recrea el título original con un aspecto gráfico moderno.

Así pues, en Black Mesa volveremos a ponernos en la piel de Gordon Freeman, el físico teórico destacado en el Laboratorio de Investigación subterráneo de Black Mesa, al que la mala suerte lo lleva a convertirse en un héroe. Y es que durante un experimento fallido, un portal a otra dimensión se abre en el laboratorio, permitiendo la entrada de una raza de alienígenas con muy malas intenciones.

Todo termina de irse al traste cuando al problema de los alienígenas se une el del gobierno, que enterado de lo que está sucediendo, manda a sus tropas de élite a silenciar todo lo que haya podido suceder, aliens y científicos incluidos.

A Gordon Freeman entonces no le quedará más remedio que luchar contra todos los obstáculos que se pongan por delante para salir con vida de una de las aventuras más emocionantes de la historia de los videojuegos.

La jugabilidad en Black Mesa (y en el Half-Life original) es una auténtica delicia. Pese a que el juego se desarrolla en primera persona y utilizaremos montones de armas diferentes como pistolas, escopetas, ametralladoras o armas de otro planeta, el juego cuenta con muchas fases de exploración y puzles, que convierten la experiencia en algo mucho más dinámico.

A nivel gráfico, como es normal, Black Mesa es mucho más detallado que Half-Life, y si bien no llega a los niveles de excelencia de otros títulos modernos, resulta apabullante por momentos gracias a su excelente dirección artística.

Black Mesa es una modificación gratuita para Half-Life que todo buen aficionado a los videojuegos debería disfrutar. Además, funciona en prácticamente cualquier ordenador con no más de cinco o seis años, es completamente gratuito, y hasta permite escuchar la banda sonora desde su página web.